viernes, 28 de octubre de 2011

Poema de Blanca Hernandez




NANA PARA DORMIR A MI MADRE

A veces no recuerda

quien le llena,

los huesos

con estrellas de papel,

su taza de horas tibias.

Se queda inmovil,

en- si -misma

perdida,

como diciendo que existir

es dia terminado,

como esperando una señal

para esfumarse,

o para

desertar.

A veces no recuerda

a quien le canta

y desafina,

no recuerda la mano que la duerme,

el aire suevecito que la mece en las tardes.

Se deja estar

quieta contra las sombras que casi en el crepusculo

disminuyen los ruidos de la casa.

A veces no recuerda

a quien se ha ido

y vuelve arrepentida,

a quien le pone nombre de paises,

y hace figuras de argamasa y miedo.

Se entrampa alli,

dentro de su campana,

incierto paraiso donde reina,

donde los hijos no han crecido

y el patio

iluminado por el sol,

es una fiesta de agua.

A veces no recuerda,

cuando se desperto,

si era feliz,

si logro conocer pasiones y galaxias.

Se aburre alli

espantando,

gorriones a plumazos,

mojando el pie derecho en sus misterios,

aun por resolver.

A veces no,

a veces no recuerda.

No me recuerda.

No.


BLANCA HERNANDEZ

domingo, 16 de octubre de 2011

Poema de Ana Muela Sopeña



NOCTÁMBULOS


La ciudad desvanece su silencio
recordando aquel día tan efímero.

Noctámbulos sin norte, entre los puentes,
la lluvia nos miraba con suavidad de agua
y el aullido de calles desde el sueño
era tiempo de luz entre las sombras.

El recuerdo nos hace vislumbrar
los sonidos exactos de la ría,
en medio de farolas y de coches
que acompañaban cálidos
nuestro deambular por las aceras.

Las horas transcurrieron sin el pánico
envuelto en los enigmas de las piedras,
refugios y edificios
de aquellas sensaciones tan magnéticas.

Nuestras huellas quedaron para siempre
ancladas en relojes de las plazas
con transeúntes lúcidos,
testigos de ese instante entre la niebla,
transitando caminos sin historia.


Ana Muela Sopeña

domingo, 9 de octubre de 2011

Poema de Diana Poblet



Aires de permanencia

Qué forma de quedarse

en este burilar ausencias
se volvieron sólidas, inmanentes, mulas tercas,
desamordazadas y queridas
las hicimos nuestras,
las desajenamos,
liberamos llantos y sentencia
fuimos la voz similar al sentimiento que arde
la fogata preñada de insomnio
Emocionamos ante el ¡Presente! que gritó la Plaza
volvieron los pañales a sus cabezas canosas de esperar
no dimensionaron las hectáreas de Memoria
hoy se camina sin la gravedad del pasado,
miles gritaron negando ausencias
aferrados al mensaje que no fue posible desaparecer:

Recordar lo que duele también es amar lo que vendrá.

La Verdad no tiene porqué ser bella,

sólo debiera ser incuestionable.


Diana Poblet


Posat de permanència

Quina manera de romandre

en aquest burinar absències
es tornaren sòlides, immanents, mules testarrudes,
desemmordassades i volgudes
les férem nostres,
les desalienàrem,
alliberàrem plors i sentència
fórem la veu semblant al sentiment que crema
la foguera emprenyada d'insomni
Ens emocionàrem davant del ¡Present! que crida la Plaça
tornaren els mocadors als seus caps canuts d'esperar
no dimensionàren les hectàrees de Memòria
hui es camina sense la gravetat del passat,
milers cridaren per negar absències
refermats al missatge que no fou possible desaparéixer:

Recordar allò que dol també és amar allò vinent.

La Veritat no té per què ser bella,

només hauria de ser inqüestionable.

Diana Poblet


Traducción al catalán de Pere Bessó