domingo, 27 de septiembre de 2009

Poema de Gabriel Impaglione





Y le canto a la gesta de la mujer y el hombre


"Yo no vengo a resolver nada.
Yo vine aquí para cantar
Y para que cantes conmigo."
Pablo Neruda
(Que despierte el leñador- VI, Canto general- Pablo Neruda)


Y le canto a la gesta de la mujer y el hombre
en el mínimo universo de los besos,
génesis del oro en cuyo oleaje
los barcos del almuerzo multiplican los puertos.

Canto al ritual del brote,
a los oficios del viento y del agua,
a la profunda noche del vino,
a las altas montañas donde reposan los astros,
al camino de luz que entra en la espesura.

Canta conmigo el grito de un Solo
que se abrazó a otro y otro
y otro más
hasta despertar la aurora.

La historia del hombre llega a la guitarra
a veces como un niño,
como una columna que regresa del frente, a veces.

Tal vez rumor de alas que deshojará la tarde
hasta desnudar la nave que viene por los sueños.

Cuando de casa en casa
a una hora precisa el pan crepite
las fieras del hambre se hundirán en su rascacielos.

Habremos cantado a coro hermanos mios
a la semilla urgente, al leño y a la llama,
al horno y al oficio,
a la risa enarbolada,
al profundo destino de la casa.


Gabriel Impaglione

martes, 15 de septiembre de 2009

Poema de Senén Rodríguez Perini




Sin fin


Gota a gota

tozudamente persistente,
termina el agua
por ahuecar la más sólida roca.

Segundo a segundo,

el tiempo que no para,

va haciendo lo mismo

con la vida.

(No hay nada más verdad

en todo el universo,

que el pasar lento y constante del tiempo

por los huesos.)

Senén Rodríguez Perini

lunes, 7 de septiembre de 2009

Poema de Lumpenpo

Pintura de Francis Picabia


Te desnudas


frente al espejo
y sin sostén ni nada

subes a la noche

a detener el tiempo.

LUMPENPO

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Poema de Maria Toscano



gránulo

tender la mano hacia el vientre de tu verbo.

sentir en cálidos gránulos tu palabra.
tender al mundo el cáliz de tus silencios donde resuenan los lábios del poema.

tender la mano y, en la mano, sentir tu verso así, seguro, el mundo entero perdonaría toda la prosa o metáfora de pobreza.


©MARIA TOSCANO

martes, 1 de septiembre de 2009

Poema de Jonatan Márquez



Secretos

Todavía tengo encima
los restos de algún bar
el café como un mar en la boca
y la boca de espaldas al beso.
Tengo a todos los que fui
silenciosos
apilados en la nuca
los ojos y los párpados
como un renglón destartalado
y una lapicera combatiente
que gana sus muertos de noche
y los entierra sin piedad
en el fondo de la hoja.

Jonatan Márquez