martes, 26 de febrero de 2008

Poema de Roque Dalton


DESNUDA


Amo tu desnudez

porque desnuda me bebes con los poros,

como hace el agua cuando entre sus paredes me sumerjo


Tu desnudez derriba con su calor los limites,

me abre todas las puertas para que te adivine,

me toma de la mano como un niño perdido

que en ti dejara quietas su edad y sus preguntas.


Tu piel dulce y salobre que respiro y que sorbo

pasa a ser mi universo, el creo que me nutre;

la aromática lámpara que alzo estando ciego

cuando junto a las sombras los deseos me ladran.


Cuando te me desnudas con los ojos cerrados

cabes en una copa vecina de mi lengua,

cabes entre mis manos como el pan necesario,

cabes bajo mi cuerpo más cabal que su sombra.


El día en que mueras te enterrare desnuda

para que limpio sea tu reparto en la tierra,

para poder besarte la piel en los caminos,

trenzarte en cada río los cabellos dispersos.


El día en que te mueras te enterrare desnuda,

como cuando naciste de nuevo entre mi piernas.


> ROQUE DALTON> del libro: El turno del ofendido

3 comentarios:

diana poblet dijo...

Aún no he leído un poema desnudo que equipare a esta belleza. Yo comprendo que estás muerto, lo que no comprendo es cómo se hace para que no muera la palabra. Inalterable tu palabra escrita ha trepado las paredes de este blog y hasta creo que te has sentado a tomar café entre nosotros.
Gracias por llegar.

Jens dijo...

Cuando te me desnudas con los ojos cerrados

cabes en una copa vecina de mi lengua,

cabes entre mis manos como el pan necesario,

cabes bajo mi cuerpo más cabal que su sombra.

Sólo estos versos, por sí mismos, logran construir un mundo. Qué forma de quedar en amor para siempre, como quedaron los huesos del poeta al buscar su otro amor, la patria.

Un gran abrazo

Jens

Lidia Gaytán dijo...

Es hermoso, sutir, rico en imagenes, rico en cadencia. Al final me robó un suspiro.

saludos,
Lidia