
Adivíname, de que color te guardo
cantando como un Himno,
el grito sagrado de tu río revuelto.
Tengo tu voz grabada en el olfato
y un poco, solo un poco de tus aguas
naufragando en mi garganta.
Mi lengua tiembla
al filo de este idioma mudo de palabras.
HORACIO FIORIELLO
4 comentarios:
Bellísimo, Horacio.
Deja sin palabras.
Con mi abrazo.
d.
Gracias Diana!
Eliminé la entrada anterior y van mis disculpas hacia Martin, porque este blog ya ha estado censurado por comentarios con publicidad incluída.
Era un comentario positivo, decía que la poesía de Horacio era hermosa pero debí anularlo para que el blog siguiera operable, la última vez lo suspendieron dos meses.
Agradezco que lo comprendan.
d.
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