La casa que habitó el marA mis suegros
María Victoria Ramírez y Ricardo Alberto Hinrichsen
Penetró el mar a tus puertas,
subió las escaleras, entristeció el recuerdo.
Saber que no te tengo, sentir que te he perdido
recita ahora el poeta desde arriba del cerro.
Poblada está tu sombra de espumilla y olvido.
Fantasmas ya sin salas buscarán otro cielo.
Cada copa trizada, cada tecla silente sonará
en el vacío, testigo de otros tiempos.
Un bostezo de alcoba se entroniza en la fuente.
Poblada con amores morirás en silencio.
Oh casa que agonizas como una abuela enferma
serás carne de escombros, aserrín, madera vieja.
Me miro en tus espejos, recorro tus pasillos,
me abrigo en tus misterios de siglo y medio.
Poblada de poesía viajarás con el viento.
MARTA ZABALETA
5 comentarios:
Eres extremadamente generosa con tus espacios, con tu timepo, y con tus palabras que aye stan en mi bog de Noticias.
Gracias por los tres,y pro ello, triples abrazos de
Marta.
Preñada de nostalgia y poesía está la casa. Amiga, aquella casa ya está inmortalizada en la memoria
eterna, por tu voz , por tu palabra.
Un abrazo marino.
amelia arellano
Nostalgico.. senti congoja... llegue a buen blog muchas felicidades me quedare para seguir disfrutando.
Ledeska
Gracias Marta por tu poesía y su acunar de mar y nostalgias. Ahí quedé amanecida, aguardando que regrese el Poeta y Marta susurrando ausencias.
Gracias a vos Marta Zabaleta.
Con mi abrazo, siempre.
d.
Gracias Amalia y LEDESKA por pasar por este café de amigos.
Con mi abrazo.
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