decile al amor que se consuma
que caiga como una rama tosca
quebrada por el viento
que cuando llegue a la tierra
haga ruido
que cuando llegue a los ojos
se forme una guirnalda deforme
decile al amor que se consuma
-afuera las bestias titilan
como estrellas-
que nadie nos mire verlo caer
que se desplome que nos destroce
que todos las memorias se diluyan
decile al amor, amor, que nos caemos
nos desplomamos, nos rompemos
como dos ramas secas
como dos árboles bajo el rayo
que caiga como una rama tosca
quebrada por el viento
que cuando llegue a la tierra
haga ruido
que cuando llegue a los ojos
se forme una guirnalda deforme
decile al amor que se consuma
-afuera las bestias titilan
como estrellas-
que nadie nos mire verlo caer
que se desplome que nos destroce
que todos las memorias se diluyan
decile al amor, amor, que nos caemos
nos desplomamos, nos rompemos
como dos ramas secas
como dos árboles bajo el rayo
© Daniela Piccione
2 comentarios:
Dana,este poema a pesar del tiempo transcurrido continúa su seducción,tiene imágenes bellísimas de un contenido nostálgico y triste.
Todo junto, belleza.
Olga Ricci, tu brumosa fotografía del árbol ha encontrado buena compañía y luce aún más espléndida.
Un abrazo a las dos,
d.
Me encantó saludos desde mi balcón
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